Apai vapa.

Nuestro hipismo se transformó en una sinfonía barata de bellas caras sonrientes que brindan alegría acomparsadas de productos ideales para algún prototipo que busca amor y no lo consigue ¿será por los libros que nunca leyó? casualmente me enteré que mucha gente tira los libros o los quema porque parece no interesarles su contenido, es un lamentable rechazo de conocer algo que realmente no existe más que en la mente del que lo escribió y seguro no tenga la verdad pero ese intento humano ciertamente me resulta atractivo, intrigante, los fenomenos que nos envuelven no carecen de significancia, de lo contrario rebosan, es como la misma luz, somos luz atravesando todo, tanta información llevamos ensima en constante cambio y no nos percatamos porque necesitamos estar concientes de nuestros problemas por eso ser feliz es difícil, no podemos serlo, algunos miedosos que tememos de aprovechar y cruzar la calle frente a los autos que vienen. Ahí nos jugamos. Sentir la vida es algo interesante, aprendemos a sentirla, aprendemos a conocer nuestras herramientas. Depende de cada uno admitir la crueldad, es como abrir la puerta, hay cosas a las que no queremos abrirle. Y se revientan burbujas y una combinación de imagenes cambia y te hace ser una persona diferente. Olvidamos cosas aprendemos otras. A todo esto siempre paramos en el kioskito y compramos algun productito. El papel val piso o donde sea, al tacho si ta de paso.