sábado, 17 de mayo de 2014

lo que pasó cuando me distraje

Pasó la mitad de la vida.
Y ya sabía los movimientos que tuve que haber echo y que no hice.
Se asomó la tristeza en todas las personas y yo no estaba triste.
Pero me contagiaron porque pude ver sus ojos y sentirme como ellos.
Ver al que no se responsabiliza pero pide más y arroja lo que los otros le confían.
Un millón de alborotos por todo el mundo, con narices y ojos diferentes.
Nos parecemos bastante.
Así es que acá estoy en mi pequeño mundito.
Distra-ido.
Astral ido.
Y vos también estás ahí en el tuyo.
Formando parte de la mitad que se me escapa.

martes, 13 de mayo de 2014

sos una preventiva barbara

De pronto...
 estaba mirando un ojo en una foto que parecía dibujado, me llamaba mucho la atención de su color y lo perfecto del círculo.
Una posición exacta.
Y se me ocurrió escribir esto:
Sos una preventiva barbara. Andar con vos es como tener un ángel endemoniado de guardián.
Aun que no lo quieras me empujas a las tentaciones, que se generan por el deseo previo de algo y luego su obtención.
Quizá algunas personas son un cartel, otras un poste, otras un tacho.
La cuestión más bien es que somos algo y cada uno es diferente.
Y vos sos un cartel. Que dice:
Soy una preventiva barbara.
Llama la atención si o si.
Y para los que son un fantasma no está bueno andar con vos.
Porque algunas personas creen en los fantasmas.
Y otras personas se creen fantasmas.
Por lo general terminan juntando un montón de criaturas ectoplasmáticas dentro de su moco.

viernes, 9 de mayo de 2014

Un Paraíso llamado Casa

Cuando nací creí que ya estaba en el cielo.
No entendía nada realmente pero estaba conforme.

Hoy estoy en un paraíso atronador, pero confortable.
Es Casa. Con techo, paredes, ventanas y puertas.
Una cama, una cocina, un baño, un patio.
Una sala de estar, un estudio, mi propia habitación y la de mi hermano.
Muchos instrumentos musicales, rústicos pero mágicos.

Me siento bendito.
No me faltes.

miércoles, 7 de mayo de 2014

Allá te ibas...

Me senté a tomar mate, los últimos siete mates. Bajo un árbol, con la espalda contra el tronco. Me atravesaba la luz del sol, micropartículas a una supervelocidad y quizá alguna chocara contra una molécula de mi ser. En realidad quería fumarme un porrito que tenía guardado. Hacía catorce minutos que salía de la facultad. Estaba haciendo un curso en la UTN del cual me había enterado en la radio que iba a dictarse en abril. Antes de prender mi faso cerré los ojos y me dejé experimentar por el sonido. Podía sentir una leve energía fresca en el tronco del árbol. Oía a los pájaros que casualmente estaban sobre mi. Volé un ratito, un ratazo. Hasta que abrí los ojos y vi a los pájaros, que eran dos, cruzarse al árbol de enfrente mio. Estaban jugando o charlando, parecía que coqueteaban. Después uno se marchó volando, me parece que era la hembra, y el otro se quedo picoteando las alas. Encendí ese faso entonces. Era un finito, tranqui. Cuando llegué a la tuca se me acercó un tipo con sombrero cubano y unos cuadernos en su brazo izquierdo. Era un estudiante de teatro que en definitiva quería venderme un pequeño flyer a dos pesos. Para contribuir a su grupo de literatura. Un conjunto de personas que escribía cuentos, relatos y poesía. De casualidad yo le conté que me gustaba escribir y que me interesaba su propuesta pero que en ese momento no tenía plata, quise convidarlo una pitada de mi porro y no aceptó. En un corte me doy cuenta que el colectivo que yo debía tomar pasaba justo frente mío. Allá te ibas, pensé. Charlamos un poco de que hacía cada uno y se fue. me quedan los últimos dos mates, me los tomo, levanto mis cosas y me dirijo a la parada que está a 39 metros. Hoy sintonicé una radio nueva, no sé como se llama pero repetía mucho algo de el país de los hoteles. Y así seguí en el bondi escuchando esa radio, viendo las hojas del otoño, pensando en que allá te ibas.

martes, 6 de mayo de 2014

Los violadores de mentes ancestrales

Los invisibles escalofríos que sobrevuelan nuestro merkaba, rodeando nuestra aura arcoírica. Hoy están penetrando nuestra conciencia para alimentarse de nuestras vivencias, se quieren conectar a nuestra dimensión humana y hojear todos nuestros recuerdos pasados.
Hoy por ejemplo se han detenido en una plaza donde ocho amigos charlan en ronda. Primero los examinan en un amplio plano general visto desde arriba, de ahí se acercan lentamente hasta ir girando uno por uno de frente y por atrás, ocho vueltas, centrándose en una persona por cada vuelta. Toman a uno como el primero y giran de forma antihoraria. Luego de completar los giros entran en la mente de uno y analizan todo lo que está pensando hasta que captan toda su esencia y su forma de comprender los mensajes que recibe, luego pasan a otro y otro hasta haber captado la esencia de cada uno. Ahora se alejan lentamente de ellos hasta situarse en el punto donde los podían observar a todos juntos y empiezan a transmitirle la energía maligna de su vida alienígena y absorbiendo todas las vivencias positivas de los jóvenes. Cuando un violador de mentes se siente lo suficientemente a gusto con la energía de una persona comienza a habitar en su cama, dentro de su colchón y así todas las noches manipula los sueños de este ser para que al otro día actúe de una manera diferente, influenciada por los deseos del alien. Así estos demonios invisibles se infiltran en nuestras vidas, nos llenan de pensamientos perturbadores y se alimentan de nuestras acciones.

Un tipo con pocos problemas

Algo resuelto, casual. Recién salido de las colchas. Algo vá tarareando en su cabeza mientras cruza la calle a comprar cigarrillos de marihuana. Algo ha de pensar este tipo.
Esta tarde se iba a juntar con sus amigos a tocar algo de música, mientras le confiesa esto a Jeny no para de pensar en Lena. Quisiera que hoy venga a verlo tocar. Es de estos vagos que no tienen una pálida idea de notas, pero afirma que la música es una sola, no puede ser fraccionada, los hombres somos sus pedazos. Ella se agacha y coge un papel del suelo que le ha llamado la atención. Déjame ver eso. Es una invitación a una fiesta con bandas invitadas. Deberían anotarse con tu banda, sería fantástico verlos en acción frente a un público que no los conoce. Pero esto pasa volando. Nunca fuimos a presentarnos. Seguimos en nuestra cueva sacudiendo nuestro polvo y telarañas de las cabezas sucias, llenas de ideas estropeadas por la falta de espacio. Tanto combustible en un oscuro galáctico escenario repleto de cometas viajeros que no oyen ni por casualidad sus bacterias se percatan de nosotros sonando con los ojos cerrados en la nave mayor.
Hoy está nublado. Tengo ganas de tomar cerveza y fumar marihuana. Es un hombre que piensa mucho en eso antes de obtenerlo. Porque antes de tocar estaba tarareando en su cabeza. Y cada segundo tras otro la realidad se funde con su imaginación como si fueran una sola. Entonces se encuentra encerrado en un castillo lleno de juguetes musicales, son su pasión, su vida misma. Pasa todo el día jugando drogado y sonriendo en su interior sólo por esto y está solo en realidad y es feliz así y se siente conectado con todos los demás hasta incluso a veces comparte el amargo sufrimiento de quien le rodee y absorbe la felicidad también y hasta otras veces se acuerda de su alma favorita a veces mujer complemento u hombre hermano, cierra los ojos e imagina como si estuviera en sus cabezas y luego esto toma forma musical...
Su cabeza está definitivamente volada mientras Jeny lo mira sentada en la plaza junto a el que sostiene una tuca hace más de media hora mirando un pájaro en un árbol que ya se fue...
Veía a Lena en esa pajarita, la veía volar y alcanzar lugares que el no podía salvo cuando tocaba su trompeta.
Ya es hora de que Jeny vuelva a casa y el no decide acompañarla, prefiere seguir sentado ahí mirando una estatua de la virgen, escuchando un poco de autos, motos, vecinos, calles y de fondo un solo de trompeta.