Apai vapa.

te estas dejando llevar por la corriente que va pendiente de la caida o vas a correr en el bosque pensando en alcanzar antes que pisar nadie tiene culpa como si hacer mal fuese matar o pisotear sin mirar como si saber o no fuese a cambiar ahora entra el pasado señor del conocimiento y encarcela al pobre presente embobado con la intriga del futuro y se come a si mismo pensando el don se clava contra su pecho el mismo que lo hacía sonreir y que lo puso triste si algo andaba mal es como la sangre de la presa la misma que corre en sus venas y si era de otro planeta ahora está pisando mi tierra pero nada va a cambiar más que su forma la esencia es la misma y no la vamos a poder ver intentarla saber no se puede pero el intento se aproxima al juego de la flecha es cotidiano donde todo está lleno de blancos esperando a ser alcanzados metas fijas y disparos anticipados que buscan coordinación de movimiento partida/llegada como colmillos en el cuello nacimiento y muerte la madera es dios y no hay dos por eso elegimos uno pero justamente ese uno que es no podemos elegirlo ese no dijo el profesor y tuviste que cambiar por capricho pero de alguna forma aprendiste igual que si matar estaba en mi simplemente dar el latigazo como soltar la lengua a hablar pero si poder frenar te hace repensar vas a notar que muchas cosas estan mal intentás cambiar cambias y te cagas muriendo con la misma cara pero con un perfume de victoria y si te undiste en la derrota? como será? senti el miedo? lo senti? bueno estas frente al combustible que te hace actuar sin pensar y se llama miedo quebrar como madera te vas a despertar habiendo olvidado el sueño y el sueño será nuevamente dueño